LOS LIBROS AYUDAN CASI MÁS QUE LAS MEDIDICINAS
"Seríamos peores de lo que somos sin los buenos libros que leímos, más conformistas, menos insumisos y el espíritu crítico, motor del progreso, ni siquiera existiría".
Mario Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura.
Viendo la especulación y el utilitarismo que ha hecho el gobierno y algunas autonomías de la pandemia en relación con la compra de material sanitario a empresas que no existían, en un momento en que la vida de miles de vidas humanas estaban en juego, me doy cuenta que hay pocas cosas en la vida que aporten tantos valores como los libros en esta compleja sociedad.
Desde el 14 de marzo 2020, fecha en la que se declaró el estado de alarma y el confinamiento de todo el país, he comprado y leído 16 libros.
Reconozco que leer me ha salvado la vida. En un año en que tanta gente ha perdido cosas materiales, pero también espirituales, la empatía, la confianza, la fortaleza, y sobre todo la salud, los libros me han ayudado a no tener miedo de perderlo todo, a pensar con calma, a tomar la medida real de la situación que se me vino encima. Me ayudó a no estar enganchada a la tele pendiente de noticias truculentas, y a inmunizarme contra la propaganda del miedo que los medios expandían, más que dar una información contrastada y crítica de la situación que vivíamos.
Aprendí a medir la situación sin desbordarla, lo que me hizo tomar decisiones más racionales que emocionales. Me ayudó a evitar el sobresalto y la improvisación. Me permití a mí misma sentir un equilibrio emocional que ayudó también a mi salud. Supe reaccionar al vaivén de las dificultades como un junco para no ofrecer resistencia a ellas, lo que me ahorró amargura y resentimiento.
Los libros ayudan a manejar mejor tu vida, por tanto te hacen asentir mucho más libre.
Los libros son una terapia, y el precio que pagamos por ellos no es un lujo, está al alcance de cualquiera. No se compran en farmacias, ni huelen a medicinas, tampoco tienen contraindicaciones, ni vienen guardados en cajas, te los da en mano el librero, o lo eliges tu misma de entre centenares de ellos, según tu estado de ánimo y lo que necesites en cada momento. Los libros esperan silenciosos y apacibles a que los lean, y transmiten paz y tranquiludad, todo lo contrario del movil, que te crea nerviosismo y estrés cuando no recibes likes o no lo llevas encima.
La concentración que se requiere para leer enriquece la mente, ayuda a la concentración, y al menos durante un rato, nos olvidamos de las preocupaciones. Ayudan a escribir mejor, amplia nuestro vocabulario, y expande nuestro sentido crítico. Ciertas lecturas nos proporcionan datos útiles que pueden ser aplicables y necesarias cuando tomamos decisiones importantes en nuestras vidas.
Pero lo mejor de los libros, es que son un salvavidas para no sumergirte en la incomunicación y en la soledad.
Luisa Vicente
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